"Highway Star" de Deep Purple interpretado por unos bestias pardas en Santiago de Chile. Por cierto, dentro de poquito tendremos por aquí a los yayos dándolo todo y fijo que ésta suena.
"Shine On You Crazy Diamond" de Pink Floyd interpretado en la ciudad de Jerusalén por los señores Breslev, unos ortodoxos muy molones y al parecer con bastante buen gusto musical.
He aquí una jam de bajos eléctricos. ¡A tope de power!
Esto es un coreano que se encuentra con dos rumanos y... De verdad que no es un chiste.
Tiendas Empik en Varsovia. Mediodía. Taquicardias que me daban ante las estanterías de música polaca de los años 70. ¡Qué nervios y qué cantidad de bandas desconocidas, sugerentes y tentadoras!
Aproximadamente una hora después salimos de ahí mi querida mujer y yo con un montonazo de recuerdos y un buen puñado de referencias musicales. Una de ellas es esta que tenemos entre manos y que estamos escuchando mientras escribimos: Breakout y su recopilatorio 'Oni Zaraz Przyjdą Tu' perteneciente a la serie Złota kolekcja que Pomaton/Warner Music dedica a los artistas más ilustres del país. Una colección de oro para una banda de oro.
Breakout, al igual que ocurre con las anteriores bandas de las que os he hablado, es una institución en lo suyo. Si Budka Suflera lo eran en el Rock y TSA en el Heavy-Rock, la gente de Breakout lo fue en el Blues-Rock. Flipantes.
Formados a mediados de los 60 bajo el nombre de Blackout por el guitarrista, cantante y compositor Tadeusz Nalepa en la ciudad de Rzeszów, pronto darían el cante por su talento en esto del Blues a nivel nacional e internacional (hay que hablar de giras por el antiguo Benelux, la URSS e Inglaterra). Tras un primer álbum en 1968 a nombre de Blackout, pasarían a llamarse definitivamente Breakout y a publicar una serie de discos que para el imaginario colectivo de la joven Polonia han quedado guardados como oro en paño: 'Na drugim brzegu tęczy' en el 69, 'Blues' en el 70 o 'Kamienie' en el 74 son alguno de los hitos de esta gente.
Tadeusz y compañía suenan a mucho Blues-Rock del bueno. A los primeros Fleetwood Mac, John Mayall, Savoy Brown, un poquito de Ten Years After... Por ahí van los tiros. En general son Blues lentos y arrastrados con un apartado instrumental (desde la batería hasta la guitarra pasando por el bajo eléctrico, por el saxo, la armónica y, cómo olvidarnos, la otra voz en este caso femenina de Mira Kubasińska) sobresaliente que te agarra las entrañas, arquear las cejas y soltar un sencillo a la par que elocuente ¡guauuuuuuuu!
Gracias a los altavoces de nuestro Ford Fiesta nos acompañaron temas como "Zapraszamy Na Korridę" (una recreación bluesaflamencada que versa sobre una corrida de toros desde el punto de vista aún más folclórico de un polaco), "Kiedy Byłem Małym Chłopcem" o "Rzeka Dzieciństwa" (que tienen ambas un rollazo guapoguapo).
De camino a Wieliczka (una de las minas de sal más grandes, impresionantes y antiguas del mundo que se ha convertido en uno de los puntos turísticos más importantes del país desde que en 1978 fuera inscrita como Patrimonio de la Humanidad) y a Częstochowa (uno de los mayores centros de peregrinación del mundo donde se rinde culto a la Virgen Negra de Częstochowa, uno de los símbolos nacionales) pudimos disfrutar del talento de Nalepa y su gente.
Ahora solamente nos queda que disfrutéis vosotros de la misma forma y manera que lo hicimos nosotros. Ahí os dejamos con uno de los temas que más me ha gustado de este estupendo recopilatorio, "Modlitwa" :
Contemplar la energía, fuerza y capacidad de superación de la ciudad de Varsovia desde las alturas del Palacio de la Cultura y la Ciencia, pasear por el Parque Łazienki, descansar las piernas frente al monumento a Chopin, zampar de lo lindo en Stare Miasto, quedarse patidifuso contemplando lo que es capaz de hacer el ser humano en el Museo del Levantamiento de Varsovia... Todos esos recuerdos y muchos más quedarán guardados en cada nota de este disco.
Escuchar los primeros compases de "Za Ostatni Grosz" mientras el coche se te queda calado un par de minutos largos en una de las vías más importantes de la ciudad es algo que jamás olvidaré. Ya sea porque me quedé alucinado con la educación de la gente (no me pitó ab-so-lu-ta-men-te nadie) o por el temazo que seguía a continuación "Wszystko To Widział Świat" o por las emotivas guitarras presentes en "Rok Dwóch Żywiołów", lo cierto es que jamásdelosjamases olvidaré ese momento.
En este viaje no he hecho más que empezar a escarbar un poquito sobre la enorme superficie de la música polaca. No soy un entendido ni una luminaria sobre la materia, pero no puedo quedarme callado ante las maravillas que nos hemos encontrado mi mujer y yo durante nuestro periplo en la patria del gran Kowalczyk.
Budka Suflera se puede considerar toda una institución de la música polaca. Naturales de Lublin, esta banda ha estado en activo prácticamente desde 1969 hasta nuestros días. Transgéneros (empezaron dándole al Blues para pasar rápido por la Psicodelia y desembocar en el Rock Progresivo, el Rock a secas, el Pop...) y también Transgeneracionales (le molan a mi querida suegra y a mis primas polacas que son adolescentes) empezaron a darse a conocer con una versión del "Ain´t No Sunshine" de Bill Withers, tituada en la lengua de Mickiewicz como "Sen O Dolinie". A partir de ahí dieron el pelotazo: cambiando disco a disco, experimentando a lo bruto con "Szalony Koń", girando por Centroeuropa, repitiendo éxito bien pasadas un par de décadas con "Takie Tango" (que sonó hasta en los bailes de nuestra boda)... Vamos, una banda con una historia y una discografía a la que prestar mucha atención.
En 1981 Budka Suflera se encuentra, como todas las bandas mundiales de la época, en una encrucijada de caminos ochenteros. Por un lado está el Rock procedente de los 70, por otro el AOR, la New Wave y el Pop. ¿Y qué creéis que hicieron estos mozalbetes? Pues decidieron, como buenos polacos, tirar por la calle de en medio y grabar un gran disco repletito de canciones memorables y de gancho como "Rock'n'roll Na Dobry Początek", "Kto Zrobił Mi Ten Żart" o el zambombazo hardrockero que sirve para cerrar el álbum por todo lo alto que es "Memu Miastu Na Do Widzenia".
Para finalizar, vamos a dejar que las letras den paso a la música. Aquí os paso el video con el audio del disco 'Za Ostatni Grosz' entero a vuestra disposición. Ya me contaréis qué os parece:
Cuando marchamos de viaje tengo una serie de costumbres impepinables, de esas que no hay quien me quite de la cabeza: profundizar lo máximo posible en la gastronomía del lugar (visitar sus tascas típicas y probar sus recetas tradicionales para luego a la vuelta trasladarlas a mi cocina), visitar sus templos religiosos (ya sea una sinagoga centroeuropea, un templo shinto o una sencilla iglesia de pueblo castellano), comprar unos dedales de recuerdo para las abuelas y hacerme con un disco representativo de la música local.
Esta misma semana mi bella señora, mi cuñada y servidor marchamos rumbo a Lisboa. Brisa fresca, bacalhau y ginjinha por doquier, callejuelas que sorprenden a cada paso, historia bien presente... Y Fado.
Paseando por Chiado nos encontramos con la Companhia Nacional de Música, una bonita tienda que cumple la función de "empresa editora, productora y distribuidora de fonogramas y videogramas musicales, que tiene como misión la producción, valoración y divulgación de obras de ámbito cultural". Allí dentro me encontré con una buena colección de Música Clásica, Tradicional y Popular de Portugal y claro... Al ver este 'Amália Rodrigues At Abbey Road' pues como que no me pude resistir.
Son 19 los temas grabados en marzo de 1952 (diez años antes de que los Beatles entraran en aquellos estudios) por la gran Amália con la compañía de Raul Nery a la guitarra portuguesa y Santos Moreira a la guitarra clásica. El repertorio escogido es bastante heterogéneo y comprende fados tradicionales, composiciones brasileñas y algún que otro detalle español. Todos ellos resultado de una única y verdaderamente inspirada sesión.
Não sei, não sabe ninguém
Por que canto o fado
Neste tom magoado
De dor e de pranto
E neste tormento
Todo o sofrimento
Eu sinto que a alma
Cá dentro se acalma
Nos versos que canto
Foi deus
Que deu luz aos olhos
Perfumou as rosas
Deu oiro ao sol
E prata ao luar
Foi deus
Que me pôs no peito
Um rosário de penas
Que vou desfiando
E choro a cantar
E pôs as estrelas no céu
E fez o espaço sem fim
Deu o luto as andorinhas
Ai, e deu-me esta voz a mim
Se canto
Não sei o que canto
Misto de ventura
Saudade, ternura
E talvez amor
Mas sei que cantando
Sinto o mesmo quando
Se tem um desgosto
E o pranto no rosto
Nos deixa melhor
Foi deus
Que deu voz ao vento
Luz ao firmamento
E deu o azul às ondas do mar foi deus
Que me pôs no peito
Um rosário de penas
Que vou desfiando
E choro a cantar
Fez poeta o rouxinol
Pôs no campo o alecrim
Deu as flores à primavera
Ai!, e deu-me esta voz a mim.