Estamos delante de un disco cuya portada no augura nada pero que nada bueno y cuyo contenido suena como al día después de un fiestorro de padre y muy señor mío, a gloriosa resaca y nostalgia por los días de oro que ya se esfumaron para siempre, a magnificencia callejera, a sordidez de esa que da como un morbillo raro, a malas buenas compañías, a chulería que rompe reglas y tabúes, a terquedad rockera y también, cómo no, a un poquito de levedad...
Y es que, no olviden, estamos hablando de Lou Reed.
De lo mejorcito de Lou Reed y de los setenta.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una joya total, de mis discos de Lou Reed favoritos. Abrazos.
ResponderEliminarNo lo tengo muy escuchado, así que lo estoy repasando ahora mismo (suena Dirt). Este me suena mucho más pesado, oscuro, denso, que otros.
ResponderEliminarTransformer es el que escuché muchas veces, el más comercial de él ¿no?
Abrazo!
Al igual que Johnny, un disco este "Street Hassle" que me pone a cien. Será por esos recuerdos a magnificencia callejera, a chulería y a momentos alocados que comentas , y en los que me inmerso cuando lo escucho.
ResponderEliminarSaludos,
JdG