Cuando era chaval...

...escuchaba siempre una emisora de radio local que pinchaba de forma asidua una canción que me llamaba enormemente la atención por varias razones: la primera era esa línea de bajo tan funky, la segunda su elegante producción y la tercera cómo no, esa voz. Pero tenían la maldita costumbre de no decir nunca el nombre del cantante o el título, por lo que me quedaba siempre con la intriga...

Afortunadamente, pasado un tiempo logré saber quién era el cantante: Luther Vandross, una de las voces masculinas con más temple, control y suficiencia que ha podido disfrutar el panorama del Soul y R&B moderno. Ah, y la canción era Never Too Much:


La chaquetilla que nos luce Vandross es de otro mundo y el Walkman de 3 toneladas huele a ochentas, pero el vídeo tiene su punto entrañable, mostrándonos que un mundo lleno de ritmo es posible, y la canción en sí misma es impecable, de eso no hay la más mínima duda.

Aquí va otra canción de este tremendo vocalista, Take You Out:


Después de la pérdida hace ya unos años de la figura de Luther, pérdida marcada como una especie de frontera entre la época clásica y la actualidad, tengo la sensación de que la música negra, falta de válidos y sólidos referentes, ha ido decayendo progresivamente en ciertos convencionalismos estéticos y musicales. Se ha ido sintetizando de tal forma que tristemente ha perdido (salvo contadadas y queridas excepciones) gran parte de esa espontaneidad, esa sensibilidad, fuerza y vitalidad que la hizo ser lo que era.

Mientras tanto disfrutaré de los clásicos, de esas contadas y queridas excepciones actuales y de la música que Luther nos dejó...